Pienso en tí y mi mundo se ilumina.
Sé que no eres para mí, sé que hay mejores opciones. Veo mejores opciones a diario. Pero no me importa; te veo y mi mundo se ilumina. Es como esas cosas que te pasan cuando ocurren, y por más que quieres alejarte, no puedes. No es cuestión de ética, ni de valores; es algo más visceral. Tenemos experiencia previa, pues. Y eso, a veces… cuenta más que lo que en verdad deberías tener en tu vida, por derecho y por honor.
Podría escribir sonetos en tu honor, pero no sería sano para ninguno de los involucrados que lo hiciera. La gente puede verlos y pues… se darían cuenta de mi hipocresía. Porque ya te he abandonado antes. Y no me malentiendas; te puedo abandonar de nuevo. Pero cuando estamos juntos, todo es más… rico. Jugoso, en cierto sentido. Vienes justo como me gusta, preparada con todos los proverbiales pelos y señales que me hacen vibrar. Es algo mágico, cuando estamos juntos.
No sé bien ni porqué escribo esto, salvo tal vez porque hace poco nos vimos nuevamente y mi mundo se iluminó de nuevo.
Me encantas, eres todo lo que busco en alguien como tú…
Nunca te vuelvas a alejar. Te he extrañado…